Invisalign – ¿Cómo usarlos?
Sarro Dental
30/04/2024
Estética dental,Odontología general,Odontopediatría
30/04/2024
El sarro dental está presente en prácticamente el 100% de la población y no es otra cosa más que la placa bacteriana que se mineraliza y se endurece, quedando enganchado sobre la superficie del diente.
Cuando quedan restos de comida o suciedad sobre los dientes, se genera la placa bacteriana. La placa bacteriana se elimina fácilmente con el cepillo de dientes, no obstante, si pasa demasiado tiempo y uno no se cepilla (no lo hace bien), la placa dental se endurece y se convierte en sarro o cálculo. Entonces, ya no desaparece con el cepillo de dientes, sino que tiene que ser eliminado con instrumental ultrasónico mediante una limpieza dental profesional en el dentista.
El sarro dental se genera de manera fisiológica, pero influyen numerosos factores en este aspecto, ya que no todos los individuos generan la misma cantidad de sarro ni en el mismo periodo de tiempo. Los principales factores que afectan a la producción del sarro dental son los siguientes:
El sarro dental no deja de ser suciedad y bacterias. Cada persona genéticamente tiene un tipo de bacterias en su boca y hay personas que tienen gran cantidad de las bacterias que generan el sarro.
La producción de sarro está estrechamente ligada a la higiene oral de cada persona. Si el cepillado dental es bueno y en la periodicidad correcta, la placa bacteriana se va eliminando y no se convierte en sarro.
Algunas condiciones sistémicas del paciente también influyen en la producción del sarro. Pacientes con enfermedades como la diabetes o la hipertensión tienden a generar una mayor cantidad de sarro.
La única manera de eliminar el sarro de la superficie dental es mediante una limpieza dental profesional, utilizando un instrumento ultrasónico y complementando el mismo con técnicas manuales.
El tratamiento es diferente según la profundidad a la que ha llegado el sarro dental:
El problema principal de no atender y eliminar el sarro dental es que cuando entra a través de las encías, ocasiona lo que se conoce como enfermedad periodontal o piorrea. En este caso, el sarro va destruyendo poco a poco los tejidos periodontales (los tejidos que dan soporte y agarre al diente). Cuando el hueso que sostiene al diente es destruido, el diente empieza a moverse hasta que al final, puede llegar a caerse.
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